En el centro de la Creación, lo más valioso, de quien prácticamente todo depende de una u otra manera está la persona humana. De ahí la importancia que tiene ponerla en el objetivo de toda planificación, en el primer lugar de toda prioridad, en el punto de mira de la sociedad.
Su valor lo tenía claro la Grecia clásica, Ulises renunció al beneficio de la inmortalidad que le prometía Calypso porque estaba muy orgulloso de ser hombre; enumeró sus características R. Kipling en su bello poema "If..."; es la recomendación de David a su hijo antes de morir:"Ten valor, sé hombre" y es el convencimiento esperanzado de P. Ricoeur de que la plenitud humana es posible en nuestros días.
La educación es el medio para que sean realidad este orgullo, esta recomendación, esta esperanza.
Lo más bello que se puede ser.. imagen de Dios
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