A nadie se le oculta hoy la urgencia del cambio en educación a fin de que pueda seguir prestando - tal como ha hecho hasta aquí - unos servicios que son fundamentales para las personas y para la sociedad.
La dificultad no está tanto en aceptar la necesidad del cambio como en ver de qué manera se puede enfrentar de golpe un gran cambio como el que hoy se requiere en educación.
El secreto está en saber muy bien a dónde se quiere llegar y comenzar pronto por una serie de pequeños cambios, todos siempre en la misma dirección.("Fare presto, vedere lontano")
En este caminar hacia una nueva situación, en los pequeños cambios decididos, siempre habrá retrocesos, dudas, preguntas, desalientos, ... pero si la mirada está fija en la meta y existe la voluntad firme de llegar, todo se convierte en estímulos que ayudan a ir avanzando poco a poco. No avanzar sería retroceder.
Es verdad que no es fácil, pero precisamente porque la tarea es dificil, es urgente pensar y trabajar juntos.
Totalmente de acuerdo con que lo que primero que se necesita es querer cambiar y decidir hacia donde se quiere ir. Después aceptar que no es fácil hacerlo porque se nos exige una formación teórico y práctica además de una creatividad que muchas veces no se posee. De ahí que sea totalmente imprescindible trabajar unidos y como se dijo en el Congreso de Escuelas Católicas la suma de los esfuerzos y capacidades de cada uno origina una progresión geométrica en los cambios, lo que en un principio parece seguir un ciclo que origina cambios.. acabará siendo una espiral.
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