La persona por su constitución está muy cerca de la Naturaleza. Ni los minerales, ni los vegetales, ni los animales le son ajenos, porque comparte con ellos muchas propiedades, es por lo que la Naturaleza siempre es su habitat, el más adecuado, el que le permite ser ella misma. Ya leemos en el Génesis "Dios plantó un jardín en Edén donde colocó al ser humano que había creado"(Gen 2,8).
Si además hay artistas que consiguen sumergir la persona dentro de la más hermosa variedad que ofrece la Naturaleza, que son sus flores, no es de extrañar el éxito alcanzado por Rebeca Louis Law que ha conseguido la magia de envolver a las personas bajo un cielo de flores naturales.
En Think1.tv hay una muestra de la creatividad de esta artista inglesa de la que se ha dicho que " consigue que sus sensoriales paredes y cielos florales estimulen a los espectadores a convertirse en participantes activos de sus obras" (Oliver Dupon)
La Naturaleza es para todas las personas, nos la han regalado, cuidémosla y enseñemos a cuidarla, no estropeemos nuestra casa. Tal vez el verano es un momento especial para conocerla mejor y aprender a respetarla.
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