Leí hace muy pocos días en un artículo de un eminente teólogo y pensador español, D. Olegario Gonzalez de Cardedal, estas afirmaciones que me parecen iluminadoras y sensatas para todos los que se dedican a la educación, a la política, a su familia, ... para todos los que caminamos por este mundo.
"No podemos vivir sin fundamentos, pero no podemos ser fundamentalistas; nos atenemos a la materia que somos, pero no seremos nunca materialistas; reconocemos la historia que avanza en superación creciente, pero no seremos nunca relativistas. por eso no nos dejamos encerrar en ese falso dilema de contraponer verdad y libertad, amor y justicia, Dios y el ser humano"
Tenerlo en cuenta, sobre todo al educar, es evitar muchos errores y, sobre todo, es recordar la grandeza y dignidad de la persona humana que está hecha para horizontes más dilatados.
Que se puede añadir a unos pensamientos tan certeros?. Solo desear que en este nuevo curso que empieza, todos los que nos dedicamos a esta labor , sepamos encontrar la medida justa y nos esforcemos en ayudar a nuestros alumnos a no desperdiciar ni un milímetro de esa grandeza a la que estamos llamados.
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