La luz del atardecer, unos compases de música, una rosa que se abre, una gota de agua, el sonido de la lluvia, un poema leído o recitado...juzgados superficialmente "inútiles" son más que necesarios para vivir.
"La belleza salvará el mundo" afirmó Dostoievski y tenía toda la razón. La poesía ocupa un lugar destacado en la belleza, forma parte de este bagaje artístico extremadamente hermoso y necesario - este mundo "inútil" para algunos - que permite a la persona vibrar, gozar, emocionarse, comunicar, expresarse, ... hacer de la palabra un denso vehículo de comunicación. Y le prepara para encontrarse con la Belleza Suprema, Dios.
Leer, escribir poesía, contagiar el gusto por ella, transmitirlo a los alumnos, potenciarles la vena poética, ponerlos en contacto con los mejores poetas no sólo es ofrecerles un buen aprendizaje, es además abrirles horizontes de gozo que no se agotan.
Tenía razón el poeta cuando afirmó " "Podrá no haber poetas, pero siempre habrá poesía".
No hay comentarios:
Publicar un comentario